La formación está enfocada a la especialización profesional tanto para la intervención psicológica como para la intervención desde Trabajo Social, Educación de calle, Orientación, Psicopedagogía, Enfermería, Medicina, etc. Además, pone el acento en el autoconocimiento y en el crecimiento personal, de modo que puede ser cursada desde cualquier otro ámbito. Ambos objetivos no pueden separarse dentro de este enfoque.

Se trata de una formación teórico-vivencial. Por lo tanto, la persona se involucra desde el primer taller como profesional y cliente. Se aprovecha este doble rol para integrar, desde la propia experiencia, los conceptos teóricos necesarios para ejercer como especialista en esta orientación. La intervención experiencial, con lo que ocurre en el aquí y ahora, es transversal y será figura destacada a lo largo de todo el Ciclo formativo, sobre un fondo de discusión teórica que irá tejiendo una buena base para el ejercicio profesional.

Entre nuestras prioridades está dotar al alumnado de una buena fundamentación teórica del paradigma humanista y de la Gestalt y, al mismo tiempo, crear un marco de confianza dentro del grupo de formación en el que poder explorar la personalidad propia, los recursos y los límites, lo que se sabe y lo que se ignora, en la convicción de que todo ello constituye la base en la que se debe fundamentar el ejercicio del acompañamiento.

El ciclo completo de formación consta de 39 talleres impartidos en fin de semana, a razón de uno por mes, siendo uno de ellos un maratón residencial de cuatro días en cada curso. Los talleres son impartidos por profesionales con experiencia en la intervención de orientación gestáltica, Miembros Titulares de la AETG.

La obtención del Diploma correspondiente se acompaña, además, con la realización de 80 horas de proceso individual -o 60 horas individuales y 40 en grupo-, y 10 o 20 horas de supervisión, según sea ésta individual o grupal, en el campo de intervención en el que ésta se lleve a cabo.